'Tenemos que dar una mejor imagen'

Nazareno Milione, flamante DT de Racing, pasó por Ultra Deportiva (Radio Ultra 98.9), programa conducido por Adrián Dadamia y Juan Pablo García, para referirse a su nueva etapa al mando del conjunto académico, luego de la salida de Gustavo Cirigliano. No tendrá una tarea fácil, ya que le tocará revertir la situación del equipo, que no ganó ningún partido en el Apertura, pero confía en lo que tiene, 'Si trabajamos como el resto, son 11 contra 11 en la cancha y se puede revertir la situación. Hay con que, hay un plantel interesante', expresó.
¿Cómo te llegó la oportunidad de volver a Racing?
Cuando se va Gustavo (Cirigliano) a la semana me llaman si estaba con ganas y les dije que si que cuenten conmigo, que iba a dar una mano en lo que podía.
¿Estabas con ganas?
Las ganas siempre están, a veces se complica mucho. Nos damos cuenta el tiempo que demanda estar al mando de un equipo cuando te alejas. La duda era esa, si podía hacerlo al 100%, pero nos rodeamos de mucha gente, tratamos de llevar colaboradores para que entre todos se nos haga más fácil.
Mientras estás en el ruedo no notas el tiempo que te lleva y es mucho lo que te demanda. Hay que estar toda la semana para entrenar, el fin de semana jugar, pero es lindo.
¿Con qué grupo te encontraste?
Un grupo muy lindo como personas e interesante futbolísticamente, que viéndolo de afuera no esperaba. Ahora le estamos metiendo mucho a lo físico y de apoco vamos a ir trabajando y dándole el gusto nuestro, que vayan adquiriendo el estilo que queremos, que vamos de a poco, paso a paso.
Agarras el equipo en un momento complicado porque hace bastante que no gana un partido…
Yo le digo a los chicos que hay que mentalizarse, se han acostumbrado a perder y tiene que ser al revés, acostumbrarse a ganar. Es mucho lo psicológico y la mente ganadora te lleva a ganar, más allá de si tenés o no jugadores. El futbolista que tiene esa mentalidad termina siendo mucho más de lo que puede dar. Cuando te mentalizas positivamente las cosas que siempre te cuestan, le metes y le trabajas, pensando que se puede, lo logras. Hay que dedicarle mucho tiempo, laburo y creer en uno mismo. Si trabajamos como el resto, son 11 contra 11 en la cancha y se puede revertir la situación. Hay con que, hay un plantel interesante.
¿Quiénes son los tres futbolistas que incorporaron?
Jona Velázquez, Brian Furattini y Alexis Figueroa.
¿El resto del plantel están todos?
Está completo. Llamamos a chicos que no estaban yendo y los que aparecían en la lista los invitamos a todos. Había muchos que no jugaban y están entrenando muy bien, con el correr de los partidos van a agarrar ritmo. Vamos a cambiar y tenemos que dar mejores imágenes.
¿Este parate del fútbol es bueno o malo para ustedes?
Para nosotros es bueno porque tenemos más tiempo para trabajar, nosotros teníamos una expectativa de trabajo con el profe entre 15 y 20 días desde que asumimos, ahora estamos en el aire y es difícil laburar así porque no sabes si ejercer más lo físico o no. Es feo porque todo esto es por violencia. Ojala se vuelva a iniciar lo más pronto posible, que la gente vaya a mirar fútbol y nada más.
¿Cómo está conformado tu cuerpo técnico?
En el día a día estamos con Lucho Rozza, después está Andrés Ventre como profe, Diego Montoto en cuarta y Elias Vaninetti como entrenador de arquero. También tenemos los allegados de confianza que siempre nos dan una mano como Api Gualtieri, Toto Cajales, Martín Montechiesi, Rodrigo Meza.
A mi me gusta siempre sumar, al haber mucha gente el jugador se entusiasma mas, porque si estas solo se siente desprotegido y sin respaldo. Lucho es de la comisión y es lindo que se den una vuelta por la cancha.
¿Cómo están con el predio nuevo de Racing?
Es hermoso, un avance espectacular que se hizo. El trabajo y sacrificio que le metieron es fundamental.
Con Racing en 2019 hiciste una campaña sensacional jugando la final con el mejor 9 de Julio de Gambini, ¿Cómo era aquel equipo?
Era un equipo con trabajo, arrancamos de cero, no teníamos nada. Falabella (Claudio), Lucho Rozza y yo, no había más nadie. No había dirigentes, canchas, ni los colegios para entrenar que lo hacíamos en la plaza, no teníamos jugadores que tuvimos que salir a buscar. Llegamos al inicio del campeonato con 30 chicos y nos sorprendió hasta a nosotros mismos. Ese primer año no íbamos a tener logros deportivos, se ganó mas partidos de lo imaginado. Nos costó dos años, hicimos cuarta, trajimos jugadores grandes que no estaban jugando y con mucho trabajo se logró ese campeonato que fue hermoso, fue de campeón para nosotros. Clasificamos, primer mano a mano con River, después con San Martín, que ganarles por tres goles era muchísimo, en la final nos tocó, yo creo, el mejor 9 de Julio de todas las épocas de Mario Gambini. Les dimos batalla, fue un resultado medio mentiroso, en el primer partido salimos 2-1 abajo terminando el partido con un disparo al palo y en el segundo erramos un penal y nos echan uno, ahí se desvirtuó todo, pero hicimos un papel muy digno.
¿Cual es tu espejo como entrenador?
Lo digo siempre y lo voy a seguir diciendo, tuve a muchos y de todos estilos, pero el Rana (Luis Nanni). Siempre me gustó su forma de trabajar, de darle juego al equipo, la identidad que te hace agarrar, te llega al jugador, protagonista.
El Racing del 2019 siempre copie las formaciones que hacía el Rana. Después te vas amoldando al estilo y clase de jugadores que tenes, a veces con lo que tenes no podes formar lo que más te gusta y hay que trabajar con otro sistema.
En su momento se dijo que en Racing la prioridad era la cancha y después lo deportivo, ¿Ahora se le da misma importancia a ambos?
Van por buen camino y tiene que ser prioridad el predio, porque en lo deportivo con trabajo no necesitas muchos más, No vamos a estar a la altura de los equipos que traen jugadores pagos y de afuera. Con trabajo y no relajándose, se puede dar una buena imagen.
Para ser una institución seria tienen que terminar el predio.
¿Sos motivador como técnico?
Eso hay que preguntarle a los jugadores. Es fundamental esa parte, que crea en sí mismo y se tienen que creer que son los mejores, salir a la cancha pensando que son los mejores y el que es dubitativo en sí mismo no me gusta, trato de inflar al jugador.
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