Viernes . 30 Mayo . 2025

Escucha en Vivo:

'Una biblioteca no es un amontonamiento de libros'

10/02/2024
'Una biblioteca no es un amontonamiento de libros'

En la Sociedad Francesa de Chacabuco funciona la Biblioteca Paul Groussac. Creada hace diecisiete años, ofrece a los socios de la institución un material muy variado reunido en sus más de mil cuatrocientos volúmenes. El presidente de la Sociedad, profesor Mario Pintos, recibió a Chacabuco para detallar cómo se inició, cómo se organizó, qué contenido existe y cómo se puede aprovechar el material existente.

'El tema de la biblioteca estuvo siempre latente acá, pero, indudablemente, primero había que hacer toda la parte de arreglos y de adecuación edilicia. Entonces, después de la inauguración del salón, que fue en el año 2007, empezamos a concretar este objetivo con la comisión, una idea que a todos les pareció brillante. Incluso ya se habían empezado a comprar ciertas cosas, únicamente para apoyo de los talleres de francés'. Así comienza el relato de Mario sobre el origen de este lugar.

Antes de avanzar con la historia de esta biblioteca, debemos recordar que el entrevistado es alguien con mucha experiencia en el rubro, ya estuvo por años al frente de su propia librería. Él mismo comenta: 'yo tenía la experiencia de la librería, y aparte ya iba a ser la tercera biblioteca que había emprendido: primero la mía, después la del Instituto de Educación Católica, que cuando se fueron las Hermanas Dominicas se llevaron todo, no había quedado absolutamente nada'. 

El comienzo

El entrevistado afirma: 'me parece que cuando uno comienza un emprendimiento así, tiene que tener un objetivo claro y definido, y por supuesto, darle continuidad'. En ese sentido, describe cómo empezó a tomar forma el proyecto: 'cuando tuvimos el objetivo que iba a tener la biblioteca, porque es cierto, no es un amontonamiento de libros. Por ejemplo, una biblioteca de cien volúmenes, puede ser más importante que una de mil, en el sentido de la selección, hacia dónde apunta, etcétera. Entonces se determinó que, como era la Biblioteca de la Sociedad Francesa, se iba a comenzar con la parte de literatura en francés. Luego se continuó con la parte en español referido a literatura francesa'. 

Respecto de los recursos con que se fue construyendo la biblioteca, Mario expresa: 'aquí colaboró bastante la gente, como había colaborado anteriormente con toda la parte de restauración del edificio, así se fue armando, se fueron comprando muebles, y demás. Sí debo decir que nosotros nunca pedimos ayuda oficial, ni tampoco nos la ofrecieron. Eso hay que tenerlo también bastante claro; ese ha sido uno de los puntos en que yo he sido bastante estricto porque todo tiene costos, de los cuales uno a veces está dispuesto a pagar, y a veces no. Además, me parece que la función no es de la institución de ir a pedir, sino del funcionario de ofrecerse. Y desde ese punto de vista acá nunca ha habido ningún tipo de ayuda ni colaboración, al contrario, ha habido cosas, no tan lejanas en el tiempo, en que se han servido de la institución para cuestiones que es mejor olvidar'. 

Siguiendo con el aspecto organizativo, Pintos nos dice que primero 'se hizo una catalogación, que todavía es la que está vigente, y ahora, desde el año pasado, tenemos aquí una colaboradora para este trabajo. En la biblioteca se trata solamente de comprar libros, sino que hay otra parte que es el inventario, el catálogo, la ubicación en las estanterías, el control cuando alguien se lleva un libro o cuando alguien lo devuelve. Para eso contamos con la colaboración de María Botta, que viene los días lunes, tres horas, y de esa manera está haciendo, de acuerdo a un programa, toda la parte de catalogación y cosas así. A raíz de eso quedaron como secciones: Literatura, Filosofía, Historia del arte, Historia Francesa, Historia Argentina, Historia de la Revolución Francesa e Historia de la inmigración'.

El nombre

Esta biblioteca lleva el nombre de Paul François Groussac Piquemal. Sobre esta figura, Pintos nos dice: 'este señor, que nació en el sur de Francia, en 1848, y falleció en 1929, vino a la Argentina siendo muy joven, en una época en que este era un país de ideas, de empuje. Groussac era una persona de un carácter muy fuerte, tenía intervenciones políticas también. Viajó bastante y trabajó bastante, por ejemplo, en Tucumán, en otras provincias, y además fue el primer director de la Biblioteca Nacional. Nos pareció que era un nombre representativo para la biblioteca'.

Los usuarios

Consultado sobre quiénes pueden acceder a esta biblioteca, el presidente de la institución responde: 'los socios de la Sociedad Francesa. ¿Por qué? Porque esta no es una biblioteca pública, como puede ser la biblioteca municipal, sino que, según los estatutos, solamente los socios de aquí pueden ser participantes de la biblioteca. Pero en realidad tratamos de obviar eso. Ha habido casos de gente que ha venido a solicitar material y se le ha concedido, aunque no sean socios y además tenemos un espíritu de apertura bastante amplio, entonces no necesariamente tienen que ser descendientes de franceses o cosas que se les parezca'. 

Actividades colaterales

Según Mario, desde una biblioteca se pueden generar otras actividades ligadas a la literatura. Un ejemplo de ello es el taller de lectura que -con gran éxito- desarrollaron en 2022. Así lo comenta: 'yo había tenido siempre patente una idea: la de tener aquí un taller de lectura. De escritura hay aquí en Chacabuco, con gente capacitada para hacerlo, pero no de lectura. Entonces, hace dos años, contactamos, por intermedio de alguien de la comisión, a la señora Patricia Rato, una mujer muy competente. Esta mujer vino, abrimos el taller, y llegamos a tener una veintena de asistentes. Fueron tres meses: septiembre, octubre y noviembre de 2022. Fue muy bueno, porque inclusive hubo un criterio distinto en base a la selección de autores y todos pudimos disfrutar, no solamente del taller, sino también de autores que por ahí no conocíamos. y con unos resultados muy buenos, la gente se fue muy conforme con eso. Pero después, el año pasado, lo tomó la secretaría de Cultura. Así que... nos quedamos con el pincel en la mano porque nos sacaron la escalera y se hizo en la Biblioteca Leopoldo Marechal.

En la grabación quedó mucho más, pero, se sabe que el espacio de un medio gráfico es finito. De manera que aquellas personas que se interesen más por el tema seguramente serán bienvenidas y recibidas por el profesor Pintos en la propia biblioteca.

feature-top