LLega desde CABA una obra en la que interviene un chacabuquense

'Ensayo para una despedida' es un unipersonal protagonizado por Stefy Sleiman, quien también es coautora del texto. En el equipo que la acompaña en la puesta en escena trabaja como iluminador el chacabuquense Rodolfo Eversdijk, quien ha entusiasmado al grupo para que vengan con la obra. La presentación será el próximo viernes 16, a las 21:00, en el Teatro Italiano.

 

En la comunicación de prensa se adelante: 'Cassandra viaja horas en tren. Viaja para bailar. Mientras viaja sueña con el futuro y el pasado. El tiempo palíndromo, el amor y la tragedia, el cuerpo y el baile. Cassandra es una adolescente que estudia danza y teatro en la ciudad de Buenos aires, ha acordado con sus padres no reprobar ninguna materia en el secundario para que ellos paguen sus clases, a las que viaja a diario, y realiza de manera constante y rigurosa, sin descanso, casi obsesivamente. Hasta que, en contra de sus planes y a pesar de su rígida disciplina, se enamora de manera intempestiva. Ese Amor la hará experimentar las emociones y experiencias más intensas, gozosas y dolorosas, que darán paso a una nueva comprensión de sí misma y de su historia'.

Consultamos con la actriz sobre qué encierra el título de la obra. 'Hay momentos en la vida donde hay que hacer cortes y hay que despedirse. De formas de vincularse, de patrones, de repeticiones, un poco todo eso nos dice el título', afirma Stefy, y adelanta: 'Es la historia de una chica, de una joven adolescente del conurbano que es bailarina y viaja a tomar sus clases, muy rutinariamente, hasta que de repente se enamora. Y eso cambia todo'. Asimismo, la actriz nos comenta que la pieza 'no solo es una obra de danza, de teatro, sino también que fusiona el lenguaje audiovisual. Tiene algo muy moderno, contemporáneo'. 

Asimismo, Sleiman desvela porqué decidieron llegar a nuestra ciudad: 'nuestro iluminador es Rodolfo Eversdijk, 'Rodo', a quien allá conocen todos como 'Ofi". Nosotros armamos toda la puesta de luces con él y trabajamos muy en sintonía porque él dialoga mucho con todo lo que es el audiovisual también para poder hacer su puesta de luces. Él estaba fascinado con el trabajo y nos dijo: 'por favor, quiero que vayamos a Chacabuco'. Y dijimos 'Sí, vamos". Así que empezamos con toda la gestión. Así que también es cumplirle el sueño a 'Rodo' de estar allá con una obra en la que él participó tanto y tuvo tanto que ver. 

-Además de actuar el unipersonal, intervenís en la dramaturgia…

-Sí. En realidad, lo que hice primero fue escribir un boceto de escenas. Escribí varias escenas y después me junté con Alejo Sulleiro, que es un gran amigo dramaturgo y director también, con quien venía trabajando hacía bastante. Y bueno, nos pusimos a escribir juntos y la terminamos. Él después le puso toda su poesía y el texto mutó un montón. Yo digo que en realidad es un texto de él, aunque Alejo no me deja decir eso. 

-¿Y cuánto de tu experiencia personal hay en ese texto? 

-Hay bastante, y en el primer boceto había mucho más. Después, cuando ya intervino Alejo, hubo algo de la ficción que nos tomó por completo y que ya empezamos a desarrollar en esa segunda escritura de la obra. Entonces, ya se alejó un poco de la experiencia real mía, pero sí hay mucho de mí, de mi historia personal y de mi propio crecimiento.

-En principio parece que este también es un trabajo experimental

-Sí, sí. Y de hecho estuvimos durante dos años experimentando muchísimo. Ahora decimos que ya estrenamos, y que estamos haciendo funciones y demás, pero un poco para nosotros, en la interna, seguimos experimentando, nos damos el permiso de que la obra siga creciendo, que esté viva y que pueda mutar a otras cosas, que nos sorprenda la propia obra.

-Imagino un unipersonal con mucho despliegue, bien exigente

-Sí, bastante exigente; es muy físico. Pero la verdad es que no me siento para nada sola en escena. Estamos todos trabajando y hay todo un equipo de contención muy grande que lo hace posible también, porque yo sola no podría haberlo hecho. 

-¿Y qué pasó hasta ahora con los públicos, con las audiencias? 

-Súper lindo. Hubo una recepción hermosa. Hay cosas divididas, opiniones divididas, mucha gente que no es de la danza, está sorprendida por cómo puede impactar un cuerpo en escena moviéndose de determinada manera. Eso fue lo que más impactó. También hablan muchísimo sobre lo buena que es la dramaturgia de la obra, de cómo están compuestas las escenas y demás. Y de las partes audiovisuales, que fue algo que quedó increíble y de lo que se encargó el director. O sea, la obra ha tenido buena recepción. La verdad es que nos han dicho cosas hermosas.

-¿Salen habitualmente al interior? 

-Esta es la primera vez que vamos a salir de Capital. Nosotros estrenamos en mayo, hicimos tres funciones de corrido y después empezamos con un ciclo de una función por mes, todos los primeros sábados de cada mes hacemos una función acá en CABA. Y como la obra habla mucho del conurbano, también necesitamos que la obra salga, que no esté en Capital todo el tiempo. Igual yo he viajado mucho por el país haciendo teatro con otras obras, con obras de teatro infantil, con obras para adultos, y siempre la recepción es distinta y es maravillosa. También hay algo en la escucha que sucede mucho más afuera de la Capital que acá. Como que hay algo distinto en el oír y en la recepción que es muy distinta. Y a mí eso me encanta. Yo la verdad que siempre que puedo salir de la Capital a hacer teatro lo hago porque me encanta.