Mascotas dignas

El lanzamiento del Programa Municipal de Adopción Responsable no es sólo una buena noticia para los 70 perros que esperan un hogar en la guardería municipal: es una declaración de principios. Demuestra que nuestra ciudad entiende que el respeto a las mascotas es clave para lograr una sociedad más empática. Integrar un perro a la familia, en especial uno de los muchos adultos o "viejitos" que suelen ser ignorados, es un acto de amor y responsabilidad que enriquece el núcleo familiar. Un perro adulto ofrece tranquilidad, es un compañero leal y es una opción inmejorable incluso para personas mayores.  El Gobierno local demuestra capacidad de innovación en materia de políticas públicas al ir más allá de la simple promoción. Para incentivar la adopción, se diseñó un paquete de beneficios que incluye la exención de tasas municipales por un año. Esta medida reconoce el compromiso cívico que implica para las familias. Además, el seguimiento sanitario del Municipio durante el primer año garantiza que las familias adoptantes no estén solas y que la mascota mantenga el buen estado de salud que le ha brindado el Centro de Tránsito Canino. El programa también es una convocatoria a toda la comunidad: a castrar de modo responsable (incluidos los machos), a no abandonar y, si no es posible adoptar, al menos a visitar el Centro de Tránsito Canino.  El éxito potencial de esta iniciativa se asienta también en la articulación público-privada. La decisión de Molino Chacabuco de sumarse al programa, proveyendo el alimento para los perros adoptados durante un año, marca su responsabilidad social.