Otro mundo está en marcha

OPINIÓN / Por Gustavo Porfiri

Mientras el decadente Occidente imperial intenta a puro bombardeo sostener su rol de gendarme mundial, durante este jueves y viernes una cumbre internacional a gran escala se está desarrollando en la capital bielorrusa, Minsk. Se trata del IV Foro Económico Euroasiático, un evento del que participan unas 3.000 personas de más de 20 países, quienes evaluarán el papel del bloque económico en la configuración de una nueva arquitectura multipolar de las relaciones internacionales.

Entre los asistentes se encuentran los líderes de los Estados de la Unión Económica Euroasiática (UEE) –Rusia, Armenia, Bielorrusia, Kazajistán y Kirguistán–, y representantes de organismos gubernamentales, así como de los sectores empresarial y académico. En el foro también participan el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y una delegación del Gobierno de Nicaragua.

El tema principal del foro es la "estrategia para la integración económica euroasiática: resultados y perspectivas". Asimismo, los participantes abordan los distintos ámbitos de cooperación dentro de la UEE: finanzas, industria y complejo agroindustrial, energía, reglamentación técnica, desarrollo del mercado interior, comercio, transporte, regulación aduanera y contratación pública, entre otros. 

El programa empresarial de la cumbre incluye una sesión plenaria con participación de jefes de Estado, así como una treintena de eventos temáticos: sesiones plenarias, mesas redondas y diálogos empresariales. Asimismo, se discutirán las relaciones del bloque con Emiratos Árabes Unidos y Mongolia, y el desarrollo de los lazos económicos con los países de América Latina y el Caribe. 

La historia y el porqué

La Unión Económica Euroasiática (UEEA) es una organización internacional regional cuyos principales objetivos son la integración económica y el libre comercio entre Rusia, Bielorrusia, Kirguistán, Kazajistán y Armenia. Se trata de una de las mayores asociaciones regionales de aquellos pagos, en la que se aplica el principio de las "cuatro libertades": se garantiza la libre circulación de mercancías, así como de servicios, capitales y mano de obra.

La génesis de esta unión económica la ubicamos en 1994, y sus progenitores fueron algunos países postsoviéticos. En 1996, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán y Rusia firmaron un tratado para profundizar en su integración económica y humanitaria. La creación de la UEEA tuvo como principal objetivo modernizar globalmente, cooperar y aumentar la competitividad de las economías nacionales y crear las condiciones para un desarrollo estable, con el fin de mejorar el nivel de vida de la población de los países miembros.

Ya en este siglo, en 2001, nació el antecesor de la organización actual: la Comunidad Económica Euroasiática. En 2010, Rusia, Bielorrusia y Kazajistán acordaron la creación de un territorio aduanero común y la formación de una unión aduanera dentro de esta estructura. En 2012, se firmó un tratado para la creación del Espacio Económico Común, que se convirtió en la UEEA, en 2014. 

Más tarde, Kirguistán y Armenia se unieron al bloque. Uzbekistán, Moldavia y Cuba -cuya inclusión le dio la expansión extracontinental- tienen estatus de observadores y pueden participar en las reuniones de la unión por invitación de los Estados miembros, pero no pueden influir en las decisiones finales. También se cerraron acuerdos de zona de libre comercio con tres países: Irán, Serbia y Vietnam.

Estructura de la organización

La UEEA está gobernada por el Consejo Económico Supremo Euroasiático, formado por los líderes de los países de la unión. Además, la organización cuenta con la Comisión Económica Euroasiática, un órgano supranacional permanente que vela por el funcionamiento y el desarrollo de la unión.

Otros de sus órganos son el Consejo Intergubernamental Euroasiático, que aprueba el presupuesto de la unión, y el Tribunal de la UEEA, que garantiza que los países tengan la misma interpretación de los documentos normativos.

Los logros

En más de una década de existencia, la UEEA no solo ha surgido como una asociación de integración regional, sino también ha demostrado su resistencia ante los retos externos y ha contribuido al desarrollo de la conectividad económica en Eurasia en condiciones geopolíticas adversas.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, declaró a finales de 2024 que en diez años el PIB agregado de los miembros de la UEEA pasó de 1,6 billones de dólares a 2,5 billones. El volumen del comercio mutuo prácticamente se duplicó en el mismo periodo: de 45.000 a 89.000 millones de dólares. Al mismo tiempo, más del 90 % de los pagos entre los países miembros se realizan en sus monedas nacionales.

Asimismo, el mandatario ruso destacó que las actividades de la UEEA contribuyen al crecimiento de los intercambios comerciales y de inversión, a la intensificación de los contactos empresariales y a la expansión de los lazos de cooperación, lo que aporta beneficios reales a cada uno de los participantes de la asociación.

Mientras esta plataforma debate cómo hacer que el mundo pueda desarrollarse en paz y cooperación, los jerarcas del Occidente imperial acaban de reunirse en La Haya, Países Bajos, para la cumbre de la OTAN. Allí se habló de 'rearme', de mayor gasto militar y de prepararse para la guerra. Es lo único que tienen como propuesta para la humanidad: la muerte. Lamentablemente, el gobierno de nuestra República eligió estar con los peores, con los asesinos de niños y mujeres. Mientras revisamos nuestras cuestiones propias, mantengamos la esperanza citando a Martín Fierro: "No hay tiempo que no se acabe/ Ni tiento que no se corte".