Un circuito de sitios históricos

Aunque no como otras ciudades que han tenido una política de Estado de preservación de su pasado, Chacabuco aún conserva distintos edificios y sitios históricos que tienen que ver con los orígenes del pueblo Guardia Nacional y sus primeras décadas de vida. Sería importante no sólo resguardarlos de alguna forma, sino también revalorizarlos como tales y difundir su existencia, para que nuevas y no tan nuevas generaciones puedan conocer de nuestra rica historia y del esfuerzo que hicieron aquellos pioneros inmigrantes y criollos para que hoy Chacabuco sea lo que es. En la ciudad todavía se conservan algunos edificios que tienen que ver con esa historia. A su vez, adentrándonos en la zona rural, existen sitios que remiten a ese pasado, como el rancho del campo La Criolla en el que funcionó el Juzgado de Paz y se constituyó la primera Comisión Municipal. También, a pocos kilómetros de allí, se encuentra el establecimiento La Posta, reabierto por su familia propietaria el año pasado, que funcionaba como lugar de recambio de caballos y descanso para los viajeros de la diligencia que hacía el trayecto Chivilcoy-Junín. Estos son solo dos ejemplos de lugares vinculados a nuestra historia cuya existencia debe ser difundida y conocida. A la lista podrían sumarse más sitios, los cuales podrían convertirse en parte de un circuito histórico que permita a la comunidad, así como a los visitantes, conocer de dónde viene Chacabuco, lo cual también ayudaría a definir, en una construcción colectiva, hacia dónde debería ir.