Anhelos individuales, proyectos colectivos

(*)Por Marcelo Chata García

La inauguración del Centro Universitario brinda a Chacabuco un espacio ideal para congregar actividades académicas de distintas instituciones de Educación Superior.  Con una veintena de salones, y una excelente ubicación, puede albergar una oferta universitaria amplia.  En lo que respecta a nosotros, se otorga a la UTN una herramienta indispensable para consolidar su crecimiento en la ciudad.  Los docentes, estudiantes y trabajadores de Aula Chacabuco tenemos la responsabilidad y obligación de llenar ese espacio de contenido, proyectos, discusiones, investigación y creatividad.

Hace 30 años, la tecnológica comenzaba a dictar su primera carrera universitaria en la ciudad.  Desde entonces a esta parte la institución ha crecido de manera lenta pero consolidada, aunando esfuerzo y dedicación de muchos profesionales de la ciudad y de diferentes sectores políticos.  Pero desde el año pasado ha sufrido un salto cuantitativo importante: pasó de abrir una o tres carreras por año, a abrir siete, multiplicando por 4 la cantidad de docentes y estudiantes que se sumaron a la propuesta.  Y esto por dos motivos, un fuerte respaldo del gobierno municipal que amplió la financiación de las tecnicaturas; y una decisión importante de la Facultad Regional San Nicolás de poner de forma definitiva dos carreras de grado financiadas por el Rectorado de la UTN.  Estos esfuerzos vienen a dar respuesta a una doble demanda: de los jóvenes para contar con la posibilidad de seguir estudios superiores, y de las empresas, para contar con profesionales capacitados.

Este 2025, la UTN Aula Chacabuco abre ocho carreras: 5 tecnicaturas universitarias (Industrias Alimentarias, Mantenimiento Industrial, Higiene y Seguridad, Mecatrónica y Programación), y 3 licenciaturas (Organización Industrial, Administración Rural y el ciclo complementario para Administración de Empresas).  

Unos 450 jóvenes de nuestra ciudad y ciudades vecinas se suman como ingresantes.  Cada uno de ellos con sus aspiraciones, objetivo y sueños personales.  Insertarse en el mercado laboral o mejorar su posición actual, ayudar a su familia o formar una, desplegar su espíritu emprendedor o simplemente ver qué puertas, qué caminos, qué experiencias y qué vínculos les abre la posibilidad de estudiar en la universidad.  Los estudios superiores les demandarán esfuerzo, tiempo y postergaciones; ahora bien, no tengan dudas que les permitirá construir aquello que anhelan.

Nosotros, además, debemos involucrarlos en proyectos colectivos.  Como universidad pública nacional, la UTN asume compromisos comunitarios.  Es una universidad que tiene como paradigma institucional la Teoría General de los Sistemas, y como ya planteaba Ludwing von Bertallanfy –fundador de la TGS- las acciones colectivas son más que la suma de sus partes.  Como universidad tecnológica tenemos la misión de ser un engranaje fundamental en el desarrollo económico y productivo de la comunidad, formando profesionales que vuelvan más eficientes la producción de bienes y servicios, de manera tal que la sociedad tenga el dinamismo que permita a cada vecino y vecina encontrar un lugar para desplegar su talento, construir su proyecto de vida y sentirse protagonista en su comunidad.

Esta optimización de recursos se consigue mediante la apropiación del conocimiento científico y tecnológico, de la adaptación y la innovación, fundamentales para incrementar la riqueza social y promover la inversión.  Pero además, desde la perspectiva holística, el crecimiento económico debe incorporar la preocupación por el cuidado de la naturaleza, la inclusión social y el respeto a la diversidad.  A ese triple objetivo –productividad, ecología, democracia- agregamos el de formar profesionales que promuevan organizaciones (laborales, comunitarias, políticas) que favorezcan la salud mental, es decir, donde cada uno de sus integrantes se sienta reconocido en sus aportes, estimulado a superarse y contenido en su humanidad.  Porque eso también intenta ser la UTN.

Por lo tanto, colegas docentes, compañeros del equipo de gestión y de secretaría, claustro estudiantil, tenemos por delante una arduo año de trabajo, lleno de desafío; llegó la hora de arremangarse.  A los y las ingresantes 2025 ¡de corazón! sean bienvenidos a UTN Aula Chacabuco.