'Hay un auge del turismo rural y lo estamos aprovechando'

Con mejoras de los caminos rurales, fomento del turismo rural, variada oferta artística y cultural, la localidad de Rawson busca ponerse en el centro de la escena para atraer visitas y dinamizar el comercio local. En esta entrevista, el delegado de ese lugar, Gustavo Millán, da detalle de los proyectos en marcha y los desafíos para avanzar en obra pública en tiempos de motosierra. Destaca los avances en materia ambiental, la renovación del alumbrado público, la construcción de cordón cuneta y la provisión de servicios básicos. 

-¿Qué trabajo se está haciendo en los caminos rurales?

-Estamos trabajando bastante, dándole respuesta a todos. Estaba todo muy abandonado, en estos últimos seis años se ha hecho muy poco por los caminos rurales. Desde que entramos tenemos una motoniveladora y máquina de arrastre y estamos abocados mucho en ese trabajo. Hoy estamos en un camino a Los Ángeles y en camino a Las Toscas. Hemos alcanzado todo, no quedó nada sin arreglar. 

-¿Cuál es la devolución que reciben de ese sector en la localidad?

-La devolución es muy buena. Yo tengo una buena relación con todos, tenemos charlas periódicas. Y a los pedidos que se van haciendo le vamos dando solución. Los caminos están bien y cualquiera que lea esto sabe que es real. 

-¿Cuáles son los principales proyectos de infraestructura que se están llevando a cabo teniendo en cuenta que el gobierno nacional recortó la obra pública a cero?

-Estamos en un momento difícil, lo poco que entra intentamos administrarlo de la mejor manera posible para poder hacer alguna obra. Tenemos un proyecto que vamos a comenzar la próxima semana para cambiar las luces de todos los establecimientos educativos de la localidad: jardín, primaria y secundaria. Vamos a hacer el recambio de catorce cuadras de luces led, ya tenemos el convenio firmado. Y después haremos el recambio de luces de la plaza San Martín, con una inversión de veinte millones de pesos. Son proyectos importantes para Rawson. 

Por otra parte, en el cementerio estamos arreglando el paredón de ciento cincuenta metros, estaba prácticamente caído. Era un desastre, había un abandono terrible. El Molino Rawson nos está dando una mano. 

Además arreglamos calles, ponemos piedras, tenemos dos proyectos de cordón cuneta, buscamos quintas para poder lotear, trabajamos con Casa de Tierra para que salgan escrituras para los vecinos, entre otras cosas. 

-¿Continuaron proyectos de la última gestión?

-No continuamos nada porque no había ninguno. No nos dejaron nada. Estamos trabajando de cero, algunos ya los comenzamos y en otros nos seguiremos ocupando. Es lamentable lo que digo, pero es cierto. 

-Desde lo cultural se ha trabajado mucho pero en particular la fiesta de la primavera cumple 40 años, ¿esta vez la celebración va a ser especial?

-Es cierto, trabajamos mucho en lo cultural desde el primer día pero además intentamos potenciar el turismo rural. Hay un auge en toda la provincia que nos impulsa.

El 12 y 13 de octubre tenemos la Fiesta Regional de Danza Folclórica, que va a ser un gran evento con cuatrocientos bailarines; y en noviembre tenemos la clásica Fiesta de la Primavera que cumple cuarenta años. Va a ser muy pintoresca en esta oportunidad, con carrozas, y muchas novedades. 

-¿Cómo es el vínculo con el Ejecutivo cuando como delegado de una localidad que crece te toca demandar distintas cosas?

-Sí, es cierto. Pero la comunicación es excelente, hay muy buenos funcionarios y aunque yo viajo todas las semanas a Chacabuco por distintos pedidos, ellos también vienen muchísimo a la localidad. La semana pasada estuvimos con directivos del Hospital, de Deportes, de Medio Ambiente. 

-¿Qué cambió en la comunidad desde que empezaron a explotar el turismo rural?

-Te puedo decir que en los últimos meses lo que cambió mucho es que el gobierno municipal está presente. Cuando vamos a Chacabuco tenemos siempre respuesta. Se está haciendo un trabajo muy grande con el área de Turismo y en conjunto con la Provincia. 

Pero desde hace tiempo la gente está más enganchada, para la Fiesta del Alfajor se inauguraron tres casas para alquilar con pileta, hay más casas en alquiler, el Colegio Santa Ana tiene sesenta camas para alquilar, y se está avanzando en un proyecto de cabañas. Nos quedaría a nosotros, desde el Municipio, tratar de hacer un camping, que lo tenemos en mente. 

Hay restaurantes que están trabajando mucho con el turismo, y estamos muy conectados con ellos. 

-¿Cuáles son las nuevas demandas de la comunidad?

-Siempre en localidades pequeñas hay muchas demandas, sobre todo porque nos conocemos. Ahora estamos trabajando en un proyecto muy interesante, queremos hacer puntos verdes, acomodar el basural. Hay muchos pedidos en ese sentido pero también mucho apoyo. La semana pasada hicimos en la Comisión de Medio Ambiente, y la Escuela Técnica de Chacabuco una serie de canastos para recuperar la recolección de residuos sólidos urbanos. 

El mes que viene habrá una serie de charlas en las escuelas para hablar sobre reciclado y compostaje, es una de las promesas de campaña. Le damos bolilla. Tengo una hija que estudió una carrera vinculada, y uno aprende. Me apuntala.

-¿Hay conflictos entre vecinos por la cuestión ambiental?

-Los conflictos que ha habido tienen que ver con las fumigaciones, pero se han resuelto. 

Es un pueblo, nos conocemos todos, se habla con los vecinos y se resuelve la situación. Solo ha habido dos denuncias con Medio Ambiente, casos en los que por ahí no hacen caso. Pero la mayoría de situaciones se resuelve sin conflicto.